u historia se relata a través de escenografías y plataformas digitales que muestran la calidad del trabajo artesanal de sus piezas icónicas, variaciones de su bolso más famoso, el “clutch”, que Bottega Veneta ha reunido en una exposición en Saint-Tropez,Francia, por la que convierte su boutique en un museo.
La muestra, bajo el título: “When Your Own Initials Are Enough: The Knot”, reunirá 300 modelos de su icónico bolso, que van desde colecciones de archivo hasta las más recientes temporadas, con una sección especial para descubrir de manera interactiva el ADN del Knot, el bolso de mano artesano, con el cierre en forma de pequeño nudo de cuero, característico de la firma italiana.
Es la primera experiencia digital que ofrece la marca, que además de dedicar escaparates al Knot en Saint-Tropez, también lo hará en una selección de sus boutiques por todo el mundo, donde los clientes podrán vivir la misma experiencia online que en la boutique de la Costa Azul francesa.
“El Knot es un referente de Bottega Veneta”, afirma Tomas Maier, director creativo de la firma desde 2001, quien explica que este bolso “aparece en todas las colecciones y en ediciones limitadas, lo que le convierte en una pieza de coleccionista” manteniendo siempre su carismática forma.
En la exposición, que estará abierta al público a partir del 3 de agosto, se podrá ver el Knot, símbolo del pasado y del futuro de la compañía, desde sus interpretaciones modernas hasta las originales, como el Knot Origami, de charol con intrincados pliegues, el Knot Vintage Jewel, bordado con cristales antiguos; el Knot Memory, de
napa realizado con una película de aluminio metálico que evita que se deforme o el Knot Metal Lace, realizado con encaje de metal sobre una lujosa pieza de raso; y otros modelos tejidos con plata de ley, raso acolchado o suave cocodrilo.
Algunos modelos sólo existen en ediciones muy limitadas, entre 25 y 100 piezas, aunque, sin lugar a dudas, el bolso más exclusivo es una versión tejida en oro de 18 quilates y acabado de diamantes en los dos extremos del cierre.EFE
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